-Calma…
-Por qué me cuesta?
-Porque tienes fuego, debes aprender a calmar ese fuego. Ese fuego te permite evolucionar, brillar, hacer cosas increíbles! …cocina a fuego lento.
[…]
-A veces veo rayos luminosos… Otras me oscurezco un poco.
-Coge la cuerda y camina. Agárrate a la cuerda, y camina. Nada más. Sigue. Paso a paso. La cuerda es para que no te pierdas, que no te caigas, que no temas.
[…]
-A veces cuando voy a lo “oscurito”, dejo de ver el brillo y la cuerda queda lejos… entonces me cuesta volver.
-Hay un click. Un momento de aviso, de retorno. Lo escuchas además.
-¿Qué debo hacer ahí?
-En ese momento cuántico está la luz… Cuando das ese salto. Sabes que es ahí donde debes saltar, pero no has visto el camino, vas a ciegas casi, pero te lanzas. Ese momento es la clave.
-Y el miedo?
-Ese miedo es el mayor premio, la mayor fortaleza, es lo que te hace estar vivo.
-Vale, a veces pasa que al traspasar el miedo y “confiar”, llega un momento de agitación, de euforia descontrolada.
-Debes aprender a calmar ese fuego, …cocina a fuego lento.