Comer es una práctica meditativa, y debemos dar a cada comida nuestra plena presencia, reconociendo las múltiples circunstancias que contribuyen a la creación del alimento y, al mismo tiempo, a nuestra existencia. Se obtiene mucha felicidad contemplando la comida antes de comerla y comiéndola después con atención.
Nos sentamos y disfrutamos de la preciada comida. Es una oportunidad que no todo el mundo puede tener, así que nos damos cuenta de lo afortunados que somos y sentimos compasión por los que no tienen nada que comer.
En la práctica de la alimentación consciente, invitamos a la campana a que suene tres veces antes de comer y recitamos las cinco contemplaciones, que son un recordatorio de dónde procede la comida y de su finalidad.
- Este alimento es un regalo de todo el universo, de la tierra, del cielo y del esfuerzos amorosos de muchos seres vivos.
- Que comamos con atención y gratitud y seamos dignos de recibir este alimento.
- Que reconozcamos y transformemos nuestras formaciones mentales insanas, especialmente la avidez.
- Que mantengamos viva nuestra compasión, comiendo de un modo que reduzca el sufrimiento de los seres vivos, contribuya a conservar nuestro planeta e invierta el proceso de calentamiento global.
- Aceptamos este alimento para crear nuestra comunidad, fortalecer nuestra fraternidad y poner en práctica el ideal de servir a todos los seres vivos.
Luego comemos en silencio durante los primeros veinte minutos, para ser plenamente conscientes de los alimentos que nos nutren. Cuando se acaba el tiempo, suena la campana (dos veces) invitándonos a compartir una conversación atenta con un familiar o amigo.
Para más información puedes consultar los siguientes libros:
Felicidad (por Thich Nhat Hanh)
Cómo comer (por Thich Nhat Hanh)
También puedes leer este artículo de la Comunidad Budista Interser:
https://tnhspain.com/practicas/meditacion/comiendo
Aquí tienes un vídeo del hermano Duc Tri sobre la alimentación en conciencia: